viernes, 7 de julio de 2006

Autovía a-48: La Esperada

Con la apertura al tráfico del tramo de autovía Chiclana-Conil, después de 12 años de conveniar su ejecución, se cumple en parte lo prometido por los diferentes gobiernos responsables del Ministerio de Fomento desde 1994. (PSOE-PP-PSOE).

No me cabe ninguna duda, que fueron criterios políticos los que priorizaron la construcción de la autovía Jerez-Los Barrios para conec­tar la Bahía de Cádiz con la Bahía de Algeciras, aunque fuera en detri­mento de la actual A-48 que une importantes poblaciones por la costa. Tampoco me suscita ninguna duda, que el enfrentamiento PSOE-PP cuando uno gobernaba en Andalucía y el otro en Madrid, provocó retra­sos en el comienzo de las obras. Tuvieron que ser los ciudadanos y los Ayuntamientos afectados los que, con movilizaciones, cortes de carre­tera y protestas agilizaran el comienzo de las obras y se despejaran las posibles dudas sobre la necesidad e importancia de la construcción de esta infraestructura para toda nuestra provincia y en particular para la zona costera de Chiclana-Conil. Por eso, con su apertura los Conileños nos sentimos especialmente contentos, porque muchos luchamos por ella tanto en los despachos como en el asfalto de la CN-340 en los cor­tes de carretera dominicales que se tuvieron que realizar. Pero, tengo que manifestar, que esta alegría que sentimos es agridulce. Por un lado, nos alegramos sinceramente por la apertura en el tramo terminado por­que va a prestar un gran servicio a todos los usuarios de esta carretera y va a acabar con los múltiples atascos y retenciones de tráfico que se producen continuamente, pero multiplicados por diez en esta época del año. Además de reducir considerablemente el número de accidentes de tráfico, así como, los beneficios para las actividades económicas y sociales que suponen su puesta en servicio.

Sin embargo, hay dos cuestiones que hacen que esta alegría se agrie y se convierta, si no en tristeza, sí en preocupación y en indigna­ción contenida. El tratamiento dado a Conil en la señalización no es el deseado ni el solicitado por el Pleno de la Corporación en repetidas ocasiones. No entendemos, con todos los respetos a otras localidades vecinas, como ya en la circunvalación de Chiclana en las diferentes se­ñales indicativas se anuncia Vejer y no Conil cuando el pueblo más cer­cano después de Chiclana es nuestra localidad, perpetuándose ese ninguneo a lo largo de todo el recorrido de la A-48 y la CN-340, salvo de aquellos enlaces en los que ya no se tiene más remedio que anunciarse Conil porque para acceder a él debe abandonarse la autovía o la carre­tera nacional. Nos sentimos, por tanto, discriminados al señalizarse localidades ubicadas después de Conil, aludiendo el Ministerio de Fomento a una normativa anticuada y desconocida, pero sin ningún sentido común. Mostramos nuestra indignación y si no se repara esta discriminación, pediremos amparo al Defensor del Pueblo.

Por otro lado, durante la construcción de la autovía se dañó el acuífero a su paso por una zona eminentemente agrícola de Conil, Las Lagunetas. Desde entonces la perdida de agua del acuífero es importan­te, afectando al nivel freático de los diferentes pozos que utilizan los agricultores para el riego de sus huertas. Ante el tremendo daño del patrimonio natural y la afectación a los agricultores, en su día, le pedi­mos al Ministerio de Fomento que reparara este daño y se buscaran soluciones a la situación provocada por las obras. Después de nume­rosas reuniones en el Ayuntamiento, se llegó a un acuerdo sobre las obras a realizar para restituir y aprovechar el agua del acuífero para el regadío. Se ha creado una comunidad de regantes entre los propios agricultores, y después de cerca de 2 años lo que no se han ejecutado son las obras prometidas por Fomento. Nos dicen que en Octubre comenzarán las obras, mientras tanto y agudizado por el verano y la sequía los pozos bajan el nivel de agua y por lo tanto, las dificultades de los agricultores para la siembra y el riego de sus hortalizas. Pedimos que con urgencia se acometan las obras prometidas.

Por fin, de manera semiclandestina se abrió al tráfico la A-48, la esperada, en su tramo Chiclana-Conil, sin inauguración oficial, ni Ministra ni Autoridades. ¿Quizás temían a las protestas de los agricul­tores de Conil?. En Conil nos alegramos por la apertura de la autovía, pero vamos a seguir defendiendo lo que creemos que es justo, nadie, nunca, nos ha regalado nada, lo que conseguimos es base de esfuerzo y lucha, y así seguiremos, como dijo Pablo Neruda "con ardiente pacien­cia".